Las licencias adjudicadas en el polígono superan el nivel previo a la crisis.

Nuestra área empresarial registra el nivel de desarrollo más alto de los últimos veinte años. La tramitación de licencias para la construcción de naves supera los niveles previos a la crisis, y desde el 2017 hasta ahora se presentaron en el ayuntamiento casi tantas solicitudes como en los diez años anteriores. En el 2017 se batió el récord con 24 expedientes, pero en los seis primeros meses de este año ya llevamos 13.

En las dos juntas de gobierno local celebradas en este mes de julio, la última esta misma semana, fueron aprobadas las licencias de obra para cinco naves: una sin actividad específica con un presupuesto de ejecución material de 789.048 euros, otra para almacén de una empresa constructora con un presupuesto de 81.956,16 euros, otra más sin actividad específica que costará 181.896 euros, otra destinada la fabricación de muebles que supondrá una inversión de 341.175,74 euros y una última destinada la oficinas que tiene un presupuesto de 89.346,40 euros. En total, casi un millón y medio de inversión solo en las obras de construcción.

Asimismo, este mes se autorizó la primera ocupación y el inicio de la actividad en la nave destinada a la producción de aceite de microalgas, una actividad innovadora en nuestro parque empresarial y en el entorno.

La actividad urbanística ve pareja al ritmo de venta de parcelas por parte de Xestur. Nuestro polígono es el que más mayor demanda tiene de toda Galicia, como demuestran los sucesivos procesos de adjudicación de suelo, que cada vez es más escaso y ofrece menos posibilidades para la instalación de grandes empresas debido al reducido tamaño de las parcelas. En estos momentos solo quedan disponibles 24 parcelas la mayor de ellas de 13.000 metros cuadrados.